Este blog contiene textos dedicados a las familias, a los padres y madres para que eduquen con buenas prácticas. Tiene dos enfoques que se complementan: el psicológico y el jurídico. Está escrito por dos grandes profesionales y amigos. Antonio Lafuente y Antonio Ortuño. Esperamos que os sea útil.

viernes, 7 de junio de 2013

15 años y un día


Hoy se estrena la película de Gracia Querejeta 15 años y un día. Ayer tuve el placer de verla en preestreno, y os comento algunas impresiones.

Breve resumen de la historia: adolescente con problemas, a su madre le viene grande la situación, y decide enviarle una temporada con su abuelo.

Considero que expresar en menos de dos horas vivencias de la adolescencia, que te ayuden a reflexionar, a emocionarte, a sacar conclusiones, es muy complicado. ¿Cómo llega un chaval de 14 años a realizar actos antisociales? ¿Por qué le gusta ser malote? ¿Por qué esa ausencia de perspectiva y de motivaciones?

un chaval vive en el desamor o en el descontrol, o en ambos, casi se asegura que va a tener problemas. Jon, el protagonista, no recibe ambas funciones con consistencia y respeto.

La madre representa el amor, el cariño, la disponibilidad, la incondicionalidad. Pero falla en el control respetuoso (sermones, excesiva dependencia, falta de confianza, preocupación desbordada). El abuelo intenta gestionar el control, la firmeza, la coherencia. Pero falla en el plano emocional, en el respeto, en la confianza. Desde el punto de vista educativo, la mezcla de ambos ayudaría al chaval a seguir adelante.


La madre no aporta seguridad, oculta cosas, necesita que le necesite, quiere fomentar su autonomía sin dejarle tomar decisiones, sin ganas de que crezca. Le quiere con locura, pero manifiesta bastantes contradicciones en su estilo educativo. El abuelo parece que va a poner orden en su vida, cierto control adecuado, pero se queda en agua de borrajas.

Total, se fabrica un adolescente, mezcla de malote-payasete, que no llega a ser ni una cosa ni la otra. Una escena paseando con su amigo por la playa, donde le preguntan ¿y tú, qué quieres ser de mayor? La respuesta lo dice todo.

Los perfiles de los demás personajes, la mayoría, son prototipos: gay empollón víctima, “supermalote” sudamericano, chica adolescente pasiva futura víctima de malos tratos… Todos con una carga melodramática demasiado intensa.


Conclusión: cuanto más nos preocupamos los adultos, más decidimos por ellos, más fáciles les ponemos sus vidas, más les hacemos sentir culpables, nos encontraremos con más pasotismo de los chavales, peor gestión de sus riesgos, más desmotivación y desencanto en sus vidas, mayor influenciabilidad. ¡Viva el cine español!

1 comentario:

  1. Hola Antonio,
    No acabo de ver claro si recomiendas la peli o no? Te parece un conjunto de arquetipos bien expuestos o una peli que se queda en lo melodramático. De cualquier manera me parece muy interesante tu reflexión.
    Menudo Lujo¡¡¡
    Gracias

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